14 de octubre de 1880
En el periódico "La Iberia" número 7341, se hace eco del artículo publicado anteriormente "Inglaterra en España" pero de una forma mucho más amplia. MUY INTERESANTE DE LEER:
INGLATERRA EN ESPAÑA
"Con este título inserta ayer El Imparcial una interesante carta del pueblo de la Línea, la cual confirma cuanto hemos expuesto sobre los abusos que suelen cometerse en el Campo de Gibraltar, y amplía los informes por nosotros adquiridos acerca del contrabando que se introduce en España por aquel punto.
Íntegra la trasladamos a nuestras columnas, considerando que de esta manera producimos una prueba cuya solidez no ha podido menos de reconocerse por los diarios ministeriales que ayer la copiaron, aunque se aprovechan de su contenido para disculpar la apatía de nuestro Gobierno, pretendiendo que en todos tiempos ha habido escándalos e invasiones que atenúan la responsabilidad que ahora se quiere exigir a la situación conservadora.
Hé aquí la carta:
—-«La insistencia con que durante los pasados días vienen ocupándose todos los periódicos de invasiones hechas por el ejército inglés que se halla de guarnición en Gibraltar en territorio de España, me mueven a dirigirle estas líneas.
Viviendo de largo tiempo aquí, he tenido ocasiones frecuentes de conocer la índole del asunto ahora debatido, y no pocas veces he sentido encenderse mí sangre de español al espectáculo de humillaciones que bien quisiera ocultar, si no fuera pecado el silencio en determinadas circunstancias.
La fecha de nuestras concesiones es antigua y puede decirse que desde 1801 el tratado de Utrecht ha sido letra muerta. Por la fecha a que me refiero se declaró una epidemia en Gibraltar, y las autoridades inglesas solicitaron y obtuvieron a título de devolución 100.000 metros cuadrados como campo de desahogo, a contar desde el pié de la Laguna. Terminada la epidemia, los ingleses no devolvieron el terreno adquirido ni el Gobierno español recordó lo pactado.
Pasaron algunos años, y en 1828, otra epidemia disculpó una nueva solicitación de 50.000 metros cuadrados que pasaron y quedaron en dominio de Inglaterra, a pesar de la formal promesa de devolución. Empezaron entonces los contrabandistas británicos a usurpar lenta y sagazmente terreno, en tanto que nuestros Gobiernos, siempre prudentes y amables, quisieran evitar todo conflicto y no trataron siquiera débilmente de obligarlos a permanecer dentro de la Laguna, situada al pié de las murallas.
Véase hoy éstas erizadas de cañones de 38 y 100 toneladas, mientras que España carece de ellos en Sierra Carbonera, en Punta Carnero y Tarifa. Olvido tanto más indisculpable, cuanto que, organizados militarmente estos puntos, haríamos imposible el paso de todo buque por el Estrecho.
Nuestro dignísimo comandante general, Sr. Canaleta, puso todo esto en conocimiento del Gobierno, y dio por su parte órdenes severísimas al comandante militar de la Línea, Sr. San Juan, para que contuviera el avance usurpador de los ingleses.
Hízolo así el Sr. San Juan, y transmitió las órdenes a los soldados del Regimiento de Soria, que dan la centinela de la frontera.
El dia 8 de Septiembre, y a cosa de media tarde, el soldado Manuel Hernández Ocaña, que se hallaba de patrulla despejando el campo español de las mujeres que se dedican a entrar contrabando por la puerta de la Línea, escapando por todos los medios imaginables a la vigilancia de los carabineros y de las matronas, ejercía su cometido a 140 o 150 metros de distancia de las últimas garitas inglesas. Un oficial inglés, el que mandaba la guardia, adelantóse con déspotas ademanes hasta el citado soldado, diciéndole se retirara 250 pasos más allá, y gritándole: spaniard, spaniard.
El soldado no se movió, limitándose a contestar: spaniard, spaniard, no, inglis, Laguna, Utrecht.
Al ver la negativa, el oficial llamó a su guardia para prender al Hernández Ocaña. Pero éste, al ver acercársele armados un cabo y cuatro soldados colorados (así llaman aquí a los soldados ingleses), caló serenamente su bayoneta, y metiendo una cápsula en el Remington, se loe echó a la cara dispuesto a hacer fuego.
Ante esta actitud, el oficial inglés se retiró con sus soldados. Impúsole, sin duda, el valor heróico de aquel hombre que esperaba sereno el ataque, solo, para defender los derechos de todo un pueblo, en frente de las formidables baterías inglesas y de un ejército de siete mil hombres.
Hernández Ocaña quitó la cápsula, puso el arma en su lugar descanso, y tendió la vista en derredor para contemplar a las cien o doscientas personas, testigos de su serenidad.
—Ahora, fuera del campo,—les dijo,—y cada cual a su casa, como ha hecho el oficial inglés con sus colorados. En el campo no cabe nadie más que ya para echar a los contrabandistas, que de todo tienen la culpa. ¡Maldito tabaco y a cuantos vagos de la Línea mantiene esta plaza de Gibraltar! Este maldito tabaco hubiera sido mi perdición y la de mis compañeros y la de España, si esta tarde no tocan retirada los colorados; porque yo me llevo de viaje si me atropellan, a tres o cuatro colorados, que hubieran echado patatas y manteca por las narices. Más vale que no haya sucedido nada, y así seguiremos con prudencia enseñando los dientes a los coloraditos que nos quieren quitar más terreno. ¡Pobres coloraditos! ¿Si querrán quedarse con España como con la India?
Y continuó sus paseos, después de este discurso tan elocuente en medio de la rudeza de su forma.
He sabido que el coronel Sr. Jiménez San Juan llamó al Hernández Ocaña, le dio las gracias por haber evitado un conflicto con su prudencia, buen tacto y serenidad.
Todo esto pasó como digo el dia 8 de Setiembre entre tres y cinco de la tarde. Desde entonces siguen los contrabandistas traficando con doble escándalo a la vista de los soldados ingleses. Los nuestros contemplan irritados estos escándalos, no obran por evitar un conflicto y se encuentran cohibidos en absoluto, so pena de dejarse prender en territorio español, lo que sería la mayor de las ofensas y el más bochornoso de todos los baldones.
Origen de muchas de estas cosas, aunque parezca extraño, es el incremento que tomó y va tomando La Línea. Tiene más de 12.000 almas, ninguna de ellas consagrada a la industria, a la agricultura ni al comercio estable. Hay aquí 200 chinos licenciados de presidio que van diariamente a Gibraltar a vender huevos y trapos a a hacer cigarros; 400 hebreos que tienen sus tenduchos en Gibraltar; 5.000 carboneros, muchos de ellos consagrados a este comercio por ocultarse en su oscuridad a las miradas de la policía; 1.000 portugueses que se dedican a carpintería, albañilería y obras en Gibraltar; 600 hijos de esta población que tienen en ella pequeñas tiendas de comercio, y 2.000 vagos reconocidos que viven del merodeo y del contrabando en pequeña escala.
Toda esta población encerrada en casas pequeñas, sucias y carísimas, forman La Línea. De qué viven todos ellos no se sabe, aun cuando no dejan de dar gran contingente los 400 o 500 almacenes de tabaco que posee la plaza de Gibraltar.
Se calcula que salen de dicho punto de 4 a 5.000 arrobas diarias de tabaco. ¿Dónde se fuma? He aquí el problema. El Gobierno español podría descifrarlo, y vendrían sus Cajas el 50 por 100 de beneficio que los contrabandistas de este género usurpan al Tesoro.
Al cañonazo del amanecer salen de La Línea como locomotoras disparadas 4 o 5.000 personas que acuden a tomar tiquetes en las inspecciones inglesas para poder entrar en Gibraltar.
Nueva ofensa para España, porque los ingleses entran en nuestro territorio como quieren y sin que nadie les exige requisito alguno. Y a este propósito recuerdo el relevo de un cónsul que quiso establecer idéntica medida que ellos en nuestro territorio.
Vienen diariamente en grandes masas, atropellando a todo el mundo por la carretera, y acompañados de sus numerosas jaurías de perros, para correr en el monte las zorras que a él trajeron y que tantísimos daños han hecho en los ganados de nuestro campo. Llaman a la Línea el arrabal asqueroso de Gibraltar, y dicen que sus habitantes son como todos los españoles.
Esta es, señor director, la verdad lisa y desnuda de cuanto aquí pasa. Déjolo a su consideración; y autorizándole para que haga de esta carta el uso que más le conviniere, queda suyo afectísimo S. S. Q. B. S. M.— Un español neto.»
Recuérdense ahora las indicaciones que no há mucho hicimos acerca del contrabando a que parece se dedica el gran número de carruajes dedicados al transporte de pasajeros desde la Línea a Gibraltar, y de las pretensiones de aquella villa encaminadas a que se le conceda la habilitación de un puerto y aduana, por más que en sus aguas ejerza indebidamente jurisdicción la Gran Bretaña.
Consideramos, pues, que es llegado el momento de que la prensa ministerial diga el resultado que ha producido la visita últimamente girada por un inspector general de aduanas a las dependencias del ramo en Andalucía.
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14 de octubre de 1884
El periódico "El Correo Militar" nº 2719 publicó el siguiente artículo sobre un tumulto en La Línea:
En La Línea se alteró el orden uno de estos días, según dicen los periódicos de Gibraltar, a consecuencia del desengaño sufrido por los miles de trabajadores que están en Ia miseria hace tres meses por efecto del cordón, los cuales creyeron de buena fe que se había levantado éste, al ver que se retiraba parte del mobiliario del lazareto. Como el tumulto llegó a tomar alarmantes proporciones, fueron presas varias personas.
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14 de octubre de 1918
El Periódico "El Día, Diario de la Noche" número 13.846 publica la siguiente noticia:
EPIDEMIA
En el Ministerio de la Gobernación han facilitado los siguientes datos de la Epidemia de Gripe:
En San Roque hay mas de 200 atacados y en La Línea hay 157 casos de gripe, habiendo ocurrido siete defunciones
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14 de octubre de 1923
En la "Unión Ilustrada" de Málaga en su página 19 se publica la siguiente Fotografía:
El ex-Alcalde y autoridades que asistieron al acto inaugural de la Clínica de urgencia y Escuela Municipal instaladas en la Barriada de pescadores de La Atunara.
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14 de octubre de 1927
La Unión Deportiva celebra con gran brillantez la Fiesta de la Raza. Organizó una velada artística en la que tomaron parte los artistas e intelectuales mas destacados de la ciudad. La Unión Deportiva, con este acto, se apuntó uno de sus mayores éxitos.
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14 de octubre de 1930
EN LA LÍNEA DE LA CONCEPCIÓN
"Línea de la Concepción, 13.— Hoy se ha declarado la huelga general como acto de solidaridad con los compañeros de Málaga.
Los establecimientos han cerrado en su totalidad.
Las autoridades militares han conminado con multas de 500 pesetas a los industriales que se niegan a abrir sus comercios."
Aquí os dejo el trabajo "1930 en Málaga La Libertad en la encrucijada" por Mª José González Castillejo
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14 de octubre de 1931
La Sociedad Cooperativa de Vendedores de Carbón Vegetal "El Fomento Industrial" con domicilio social en Plaza de la República , 6, elige la nueva Directiva:
Cargo
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Nombre
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Domicilio
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Presidente
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Don Francisco de Cozar Iborra
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C/ Andalucía
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Vice-Presidente
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Don Diego Macías Moreno
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C/ Benito Pérez Galdós
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Secretario
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Don Dionisio Moreno Rodríguez
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C/ Méndez Núñez, 19
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Vice-Secretario
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Don Francisco Meléndez Rojas
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C/ F. Ferrer, 47
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Tesorero
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Don Jose Boza Pérez
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C/ Clavel, 30
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Interventor
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Don Francisco González Soriano
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C/ Clavel
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Delegado
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Don Isidoro Muñoz González
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C/ Sol
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Vocal
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Don Félix Moreno Sánchez
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C/ Sol, 7
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Vocal
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Don Francisco Gavilán Pérez
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C/ Joaquín Costa
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14 de octubre de 1961
En el Teatro del Parque se presenta la Producción de:
Alfredo Alaria
en el estreno ¡DE LAS VEGAS A ESPAÑA...!
Con la Vedette Mundial
NICOLE BLANCHERY
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Luis Javier Traverso
